Orando por más

Es fácil orar por cosas buenas. Quieres que tus seres amados estén sanos y seguros. Deseas que el malestar y la violencia en tu país terminen. Quieres que tus hijos sigan a Dios. Pides que aquellos que están sufriendo enfermedad sean sanados. Deseas que la felicidad en tu matrimonio sea restaurada. Estas son cosas buenas. Pero, ¿tienes el valor para orar por más? Minimizas a Dios cuando solamente pides por cosas que te parecen apropiadas para ti. En la oración de nuestro Señor, Cristo nos presenta algo mejor por lo cual orar: Él pide que el reino de Dios venga y se haga Su voluntad. Esta petición requiere confianza en Dios. Es una súplica por que Dios haga cosas más allá de lo que puedes pedir o imaginar. Este ruego redefine tu expectativa de lo que es bueno y audazmente proclama que Dios tiene mejores planes para tu vida que los que tú tienes. Cuando tú y yo hacemos esta oración, no sabemos plenamente qué puede significar esto para nuestras vidas. En humildad reconoces que no sab...